El radicalismo porteño confirmó la hegemonía de Enrique Nosiglia y Emiliano Yacobbiti

Comparte esta publicación:

Compartir |



Publicado: 12/12/2017
   SIGUIENTE  >>

Las elecciones internas del radicalismo porteño confirmaron la hegemonía del sector que conducen Enrique Nosiglia y Emiliano Yacobbiti, que barrieron en las únicas cinco comunas donde hubo elecciones a sus rivales internos.


La alianza de Nosiglia y Yacobitti con Daniel Angelici a nivel de autoridades de la UCR porteña y delegados al Comité Nacional, que encabezará el ex ministro del Interior de Ricardo Alfonsín; no se trasladó a todas las comunas.

El ex intendente Facundo Suárez Lastra, que quedó afuera del acuerdo global presentó pelea en cinco comunas: la 1, la 9, la 13, la 14 y la 4. En todas perdió, pero acaso la derrota más humillante fue la de la comuna 14, por tratarse de su barrio, Palermo.

Suárez Lastra, que es funcionario del macrismo, se apersonó en la escuela de votación y hasta le hicieron notas en Canal 7, se supone un favor de su amigo, el titular del multimedios oficial, Hernán Lombardi.

Sin embargo, el paupérrimo nivel de participación -votaron menos de 700 personas sobre un padrón de 7.000 afiliados- lo hizo percibir que el resultado venía mal y dos horas antes del cierre se retiró. Terminó perdiendo por ocho votos -340 contra 348 que sacó la lista de Yacobitti y Nosiglia-.

La derrota de Suárez Lastra es ineludible porque él mismo se colocó en la boleta de la comuna 14 como vocal al Comité Nacional y hasta incluyó en la papeleta a María Inés Parry, legisladora de Vamos Juntos, electa en la última elección, como parte del acuerdo que selló con Larreta para enfrentar a Lousteau.

El otro derrotado, a nivel de comuna, fue Angelici. Presentó boleta propia en la comuna 4, barrio de La Boca, encabezada por el dirigente Diego Barroveno y cayó ante Víctor Hugo Salazar del sector de Rafael Pascual, que fue con la lista de Yacobitti y Nosiglia. Se trata de una derrota simbólica importante para Angelici, porque perdió en el barrio del club que preside.

Sin embargo, el presidente de Boca puede considerarse ganador porque a nivel de la Capital, fue parte de la alianza ganadora.

Si bien el hijo de Nosiglia festejó el triunfo como una victoria del radicalismo díscolo frente al poder del establishment de Cambiemos que no habilitó primarias a Martín Lousteau, la verdad es un poco más compleja.

Fuente lapoliticaonline.com