El Gobierno porteño vendió otro terreno en Retiro, ya recaudó 206 millones de dólares

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Publicado: 27/04/2018
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El Gobierno nacional subastó otro terreno en Catalinas Norte donde se podrán construir oficinas. Por el lote, que queda en el playón ferroviario de Retiro, consiguieron 25 millones de dólares, que se destinarán a la obra del Paseo del Bajo.


Según informaron en la Agencia de Administración de Bienes del Estado (AABE), la subasta fue ganada por la firma BAP, un fideicomiso. El jueves que viene rematarán otra parcela, que saldrá con una base de 23 millones de dólares.

El año pasado, entre octubre y diciembre, vendieron otras cuatro, tres de los cuales adquirió la empresa Consultatio, de Eduardo Costantini, y la restante la compró el grupo TGLT. Con la venta de este mediodía, suman 206,8 millones de dólares. Queda por vender una séptima parcela, pero aún no está definida la fecha de la subasta.

El objetivo es recaudar en total unos 250 millones de dólares, que se destinarán a la construcción del Paseo del Bajo, la autopista subterránea que ya se está haciendo para unir Puerto Madero con Retiro, y que incluirá un parque lineal. Ese proyecto costará en total 650 millones de dólares, y su otra fuente de financiamiento es un crédito de 400 millones de dólares que otorgó la Corporación Andina de Fomento.

La venta de estos terrenos es parte de la política del Gobierno nacional de desprenderse de inmuebles y terrenos que considera desaprovechados para fomentar la inversión privada y la generación de empleo, y a la vez conseguir dinero para obras de infraestructura. Además de las parcelas de Retiro, de acá a julio venderán dos terrenos en Puerto Madero, uno en Palermo y otro en la zona de Las Cañitas, con los que esperan sumar cerca de 225 millones de dólares.

Además, Presidencia de la Nación ya autorizó la venta de terrenos en La Boca, el playón ferroviario de Colegiales y parte del que da a la Avenida del Libertador, en Retiro.

En muchos casos, la venta de terrenos públicos a privados despierta reclamos de parte de vecinos, que se oponen a la edificación en sus barrios. En el caso de Catalinas Norte esa queja casi no tiene lugar, dado que el terreno afectado terminará teniendo un perfil urbano muy similar al que desde hace años definieron las torres que dan sobre Leandro N. Alem.

Además, estos emprendimientos deberían aliviar a futuro una situación concreta: en Buenos Aires faltan oficinas de calidad, lo que en los últimos años viene empujando a la suba los precios de los alquileres.

Clarin.com