Los artistas callejeros contra la ley que regula la actividad artística en la vía pública

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Publicado: 05/07/2018
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Bajo el lema "El arte no es delito", distintas organizaciones de músicos y artistas callejeros se reunieron ayer en la puerta de la Legislatura porteña. Se manifestaron en contra de la Ley 1664-J-18, presentada por el Poder Ejecutivo que regula la actividad artística en la vía pública.

"Más allá de las medidas que consideramos corporales, sentimos que nos quieren matar de a poco. Nos da mucha tristeza sentir una persecución en nuestra ciudad, cuando en otras partes del mundo nos reciben tan bien. Pedimos que se repiense la normativa legal, que no nos exterminen. Lo que hacemos embellece, aporta a la cultura; no tiene nada en contra". El que habla es Alejandro Cabrera Britos, de la Asociación Civil Frente de artistas ambulantes organizados (FAAO).

Según el comunicado de los artistas, "en el Código actual se dispone que la policía solo puede usar la fuerza pública en casos de una contravención flagrante, solo luego de una advertencia y si la persona persiste en la conducta. La modificación elimina la posibilidad de advertencia, y a autoriza a llevarse detenida a una persona que esté haciendo algún ruido molesto, sin advertencia y sin posibilidad de bajar el volumen o hacer cesar la actividad". También, que el juez podría imponer sanciones de 1 a 5 días de prisión para los infractores. Y que “el Estado podrá perseguir a quien entienda que realiza los ruidos, aun cuando no exista denunciante o el mismo retire la denuncia".

Sin embargo, Daniel Presti, Presidente de la Comisión de Justicia de la Legislatura de la Ciudad, salió a poner paños fríos: "Se trató de una interpretación errónea de los artistas. La ley no apunta a perjudicarlos. Vamos a convocarlos y a manifestarles nuestro interés para que sigan trabajando y nada los afecte. El malentendido se va a solucionar". Y agregó que “no se trata de un proyecto que limita a los ruidos molestos. Fue pensado para las contravenciones no provistas, como ruidos de gritos de madrugada, u hostigamiento de trapitos o limpiavidrios. Lo de intervenir a pesar de que no exista una denuncia formal tenía que ver con, por ejemplo, situaciones como la de una mujer que no se anima a denunciar a un trapito o limpiavidrios".

El FAAO nació a fines de 2014. A mediados de ese año, la Policía Metropolitana había desembarcado en el subte, y en apenas dos meses, 48 artistas denunciaron atropellos de la fuerza. Para amortiguar esas intimidaciones, los artistas ambulantes decidieron organizarse. Cabrera Britos trabaja en la calle desde 2003. Comenzó en el Parque Centenario y hoy se lo puede encontrar en San Telmo. Según sus cálculos, en la Ciudad de Buenos Aires hay más de 3.300 artistas ambulantes. A nivel país, el número supera los 19 mil. "La calle, además de representarnos la comida de cada día, nos genera una agenda de trabajo: muchos de nosotros somos contratados por los pasajeros o transeúntes para eventos privados", aclara Cabrera Britos.

Por su parte, desde el Ministerio de Cultura de la Ciudad se manifestaron a favor de "intervenir para que ningún artículo perjudique al arte callejero", le aclararon sus voceros a Clarín.

CLARIN.COM