Violencia urbana: otro agente de tránsito herido por un automovilista

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Publicado: 09/10/2018
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Según el Gobierno porteño, siete de cada diez empleados afirma haber sido víctima de algún tipo de agresión mientras cumplía con sus tareas en lo que va de este año, tanto de parte de automovilistas como de peatones.


Un nuevo caso de un agente de tránsito atropellado por un conductor en un operativo vial realizado este fin de semana volvió a traer al primer plano un problema tan cotidiano como grave: las agresiones que sufren los efectivos que trabajan en los controles callejeros.

"Las más comunes son las verbales, como amenazas, insultos y hostigamiento. En algunos casos, automovilistas avanzan con sus vehículos pisando los pies del agente. También se registran empujones y golpes de puño, en otros casos los escupen", informaron en la Secretaría de Tránsito y Transporte del Gobierno de la Ciudad.

El último episodio se dio el sábado a la noche. Un grupo de agentes de tránsito estaba realizando un operativo en Independencia y Entre Ríos, en el marco de los cortes por la fiesta inaugural de los Juegos Olímpicos de la Juventud. Un hombre que conducía un VW Fox patente GER682, se enojó ante las indicaciones de los efectivos e intentó fugarse. Al hacerlo, arrolló a un agente, que golpeó contra el capó y el parabrisas del auto. Además, lo arrastró varios metros.

Luego de que se detuvo, se produjo una fuerte discusión con personas que circulaban por el lugar y con los otros agentes. El auto del agresor recibió varios golpes en la chapa, una ventanilla trasera y la luneta.

Cuando lo pudieron frenar y le hicieron el control de alcoholemia apareció parte de la explicación: el conductor tenía 1,46 gramos de alcohol por litro de sangre, el triple de lo permitido. Finalmente, al agresor se le labró una multa por “no respetar indicaciones de la autoridad de tránsito”. La multa cuesta $ 647,75 si se opta por el pago voluntario. Además, resta dos puntos en el scoring.

En la Ciudad circulan a diario 1.600.000 autos particulares, 37.000 taxis y 10.000 colectivos. Para controlar el tránsito, el Gobierno porteño creó en 2008 el Cuerpo de Agentes de Tránsito, que absorbió la función de control que antes tenía a su cargo la Policía Federal. Ese Cuerpo cuenta hoy con 2.400 efectivos operativos, que trabajan especialmente en el Macrocentro y en los controles de alcoholemia, más otras 250 personas que se ocupan de tareas administrativas. El54% son mujeres.

El último año, la dotación de personal creció un 62%, de la mano de un aumento en la cantidad de controles, según informa la Secretaría. Por ejemplo, afirman que hoy realizan 25 operativos de alcoholemia los fines de semana, y que hay 40 puestos de control de motos.

En esas tareas es cuando más problemas aparecen. Los controles de alcoholemia y drogas son un foco de conflicto, porque la gente muchas veces se niega al chequeo, o después de dar positivo insisten para que no les secuestren el auto. También aumentaron los conflictos con los motociclistas, en especial desde que, el año pasado, sumaron las primeras grúas para llevarse a las motos mal estacionadas en el Centro.

Pero las discusiones callejeras también se dan por cuestiones incluso menos conflictivas que hasta son consejos para la seguridad vial de los ciudadanos. Los agentes cuentan que son insultados por peatones cuando les piden que crucen por la senda peatonal, o por automovilistas cuando les dicen que se pongan el cinturón de seguridad o que los niños no viajen en los asientos delanteros.

Para convertirse en agente de tránsito, una persona debe aprobar un curso de ocho semanas con una evaluación final. También reciben capacitaciones específicas de mediación de conflictos. Además, se los actualiza en los cambios que pueda haber sobre la normativa de tránsito o sobre el uso de nuevas tecnologías para el control de tránsito: por ejemplo, las infracciones de tránsito desde el año pasado ya no se hacen con los talonarios de boletas sino a través de una aplicación que tienen cargada los agentes en los celulares que les dan para trabajar.

Los agentes son monotributistas y cobran en bruto $ 17.602, de los cuales les quedan unos $ 14.000 en mano. Trabajan en turnos de siete horas.

“La violencia nunca es el camino. Entre todos debemos mejorar la forma en la que nos movemos y nos relacionamos en nuestra Ciudad, respetando las normas y poniéndonos en el lugar del otro”, aseguró Juan José Mendez, secretario de Transporte porteño.

 CLARIN.COM