Los planes oficiales para las tierras que quedaron liberadas debajo de las vías no coinciden, a criterio de los moradores, con las necesidades de esa zona del barrio.
Cuatro fueron las empresas que se presentaron: Viaducto Policultural S.A, Dorrego CMA y Sang Hak Choe interesadas en manejar los tres sectores del bajo viaducto (Barrio Chino, Clubes y Olleros), y una cuarta propuesta, la de Fogsa S.A. que solo aplica para el tramo de los clubes, entre Juramento y Olleros.
Tal como habían adelantado desde la AABE, la convocatoria es para el diseño, la construcción, el mantenimiento y la explotación de los denominados "espacios bajo viaductos". Ahora, una comisión evaluadora analizará las ofertas según diversos criterios presentados en el pliego: el proyecto urbanístico, de espacio público e integración con la ciudad de Buenos Aires, la inversión que se realizaría y el canon sugerido (cuya base fue planteada por el pliego).
De las oferentes, hay dos sociedades que no llevan más de 90 días activas. Es el caso de "Viaducto Policultural", directamente creada a los fines de gerenciar estas tierras y que tiene entre sus fundadores a un ciudadano chino, referente de la comunidad fuertemente arraigada en el Bajo Belgrano, y de Dorrego CMA, cuya única aventura previa fue competir en la subasta por la venta del predio El Dorrego, en Colegiales. La que finalmente ganó el grupo Sancor Cooperativa de Seguros.
Sang Hak Choe, por su parte, es un empresario coreano que hace tiempo decidió invertir en la Argentina. Su actividad está relacionada a la importación textil, tiene una distribuidora y otra firma en la que es broker, oficiando como tal entre empresas coreanas y chinas para con el mercado local.
Si bien los perfiles de cada candidato son diversos, el objetivo principal en todas las propuestas apunta a ser el inmobiliario, con potestad para subdividir y arrendar el espacio bajo las vías con usos diversos, dentro de los cuales los espacios verdes y públicos no parecen contar con mayoría. Y es en esto donde reside la preocupación de los vecinos, que resisten frente a un proyecto difícil de frenar.
"No estamos dispuestos a aceptar que en estos difíciles momentos de la economía de nuestro país, con más de 150 negocios que han tenido que cerrar sus puertas en los últimos dos años, perdiendo esos comerciantes su capital instalado y sus empleados sus puestos de trabajo, decida nuestro gobierno concesionar espacios para construir cientos de locales y generales. Esto es una mayor competencia a los locales de nuestro barrio que están sosteniendo con un gran esfuerzo sus comercios", refiere el comunicado del Centro Comerciantes de Belgrano, entidad que nuclea al grueso de los negocios de la zona.
Desde el organismo, además, señalan cuáles son las verdaderas necesidades del barrio desde el punto de vista de quienes lo habitan: juegos para sus niños, lugares de esparcimiento para sus jubilados, centros culturales, espacios para ONG´s, estacionamientos públicos de automóviles y zonas verdes.
El Viaducto Mitre, inaugurado el 10 de mayo pasado, beneficia a más de 200.000 mil personas gracias a la eliminación de ocho barreras y a la apertura de cruces seguros en su lugar, además de una mejorada forma de viajar en tren. Ahora, resta ver cómo benefiará el destino de las tierras bajo las vías a vecinos y visitas.
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