Propuesta para que los funcionarios de la Ciudad pongan sus bienes en un fideicomiso ciego

Comparte esta publicación:

Compartir |



Publicado: 07/07/2016
   SIGUIENTE  >>

El proyecto fue presentado por el diputado Maximiliano Ferraro de la Coalición Cívica ARI, y alcanzaría a los funcionarios que tengan un patrimonio superior a dos millones de dólares.


Al explicar su proyecto, cuyo objetivo es promover la transparencia política e institucional, Maximiliano Ferraro sostuvo: "De esta forma el funcionario pondría en un fideicomiso, al menos el 80% de los bienes que comprenden su patrimonio total, para evitar posibles abusos, choque de intereses o aprovechamientos de su situación ventajosa mientras dure el cumplimiento de sus funciones", Explicó que "Una de las principales prohibiciones del fideicomiso es invertir en empresas públicas o en negocios que efectúen una parte sustancial de su actividad con el Estado". Y finalizó diciendo: "Es un gran avance si queremos constituir una democracia moderna recurrir a la figura del fideicomiso ciego, que consiste en privar al funcionario público electo -mientras dure su desempeño o ejercicio del cargo- de la administración, control y acceso a la información respecto del día a día de sus inversiones y negocios, de modo de eliminar toda posibilidad de conflicto de interés entregando esta tarea a un tercero. En Estados Unidos, la primera persona electa para un cargo público que utilizó la modalidad del fideicomiso ciego fue el presidente Lyndon Johnson, debido a que su familia era dueña de la empresa radiodifusora y de televisión".

Según la propuesta, la obligación alcanzaría al Jefe y Vicejefe de Gobierno; los Ministros y titulares de los entes descentralizados, los diputados de la Ciudad; los miembros del Tribunal Superior de Justicia y del Consejo de la Magistratura, el Síndico General y el Procurador General; los Directores del Banco de la Ciudad de Buenos Aires; las personas que integren los organismos de control, con categoría no inferior a la de Director General y el jefe de la Policía Metropolitana, que tengan un patrimonio superior a dos millones de dólares.