“La Ciudad mejoró muchísimo la integración del sur”

Comparte esta publicación:

Compartir |



Publicado: 12/07/2016
   SIGUIENTE  >>

FUENTE: Melisa Yael Jofré / Semanario Parlamentario

Octavio Calderón destaca las políticas del Gobierno local y apuesta a que “avancen” los barrios que continúan postergados. Por otra parte, relata su experiencia como colaborador de la Fundación Margarita Barrientos.


Nació en San Rafael, Mendoza, pero en la actualidad ocupa el cargo de legislador de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Después de haber estudiado abogacía en Córdoba, decidió venir a vivir a la urbe porteña a fines del 2000. Octavio Calderón es uno de los 28 diputados que integran el bloque del Pro y su acercamiento al espacio político liderado por Mauricio Macri surgió de una manera bastante particular.

El diputado fue -y es- mano derecha de la referente social preferida del presidente. Calderón se acercó al comedor social Los Piletones, en medio de la crisis de 2001, y comenzó a ayudar en su obra a Margarita Barrientos, hasta la actualidad.

Desde su despacho en el Palacio Legislativo, revela que como legislador sale “a recorrer lugares” y, sobre todo, la zona sur que “es la que más me interesa que avance”. Asimismo, considera que “la Ciudad de Buenos Aires mejoró muchísimo lo que es la integración del sur con el resto de la Ciudad. El sur estaba muy aislado”.

En diálogo con Semanario Parlamentario, el diputado sostiene que “la gente no se anima a conocer el sur” y sugiere que a los porteños “le haría muy bien ir a recorrer la zona sur, concurrir a los recitales que se hacen en zona sur, eso va a ayudar a la integración”. “Desde el Gobierno hay muy buena política de integración de la Ciudad, pero a veces hay mucho prejuicio por parte de los ciudadanos”, agrega.

- Usted trabaja desde hace años junto a Margarita Barrientos, ¿cómo surgió el acercamiento entre ambos?

- En 2001, en medio de la crisis, empecé a buscar un trabajo para poder ayudar en las villas. Como no era de Capital Federal, cuando conocí las villas me pareció algo terrible cómo la gente vivía. Empecé a buscar en diarios y justo encontré uno donde estaba Margarita Barrientos, inaugurando un centro de salud. En el mismo diario decía cómo ayudar y había un teléfono. Yo no conocía la obra, ni a Margarita, ni todo lo que había hecho. Y me llamó la atención porque llamé y me atendió ella. Bueno, le dije que quería ayudarla en la villa y en el comedor, como abogado para lo que sea. Cuando nos encontramos, ella me propuso “yo te ofrezco que en el centro de salud que se inauguró empieces a tomar consultas como abogado y ahí vas a conocer a los vecinos”. Empecé a tomar consultas, en principio los vecinos pasaban y miraban medio raro. Después sí tomaron confianza y venían a hacer consultas de abogacía y otras cosas. También colaboraba con ella haciendo los escritos para donaciones.

Fuimos haciendo varias cosas hasta que en el 2002, 2003, al comedor se le cortaron la cantidad de raciones suficientes; en realidad seguía la misma cantidad de raciones pero había aumentado mucho la cantidad de gente, y ahí no daba para dar la cena y el almuerzo. Entonces, un periodista muy conocido nos quiso brindar su ayuda y le propuse poner una fábrica de pastas. Él finalmente nos dio la donación completa. Cuando se inauguró, lo invitamos a la inauguración a Mauricio Macri. Él vino, se presentó, vio la obra y le encantó. Se involucró mucho en la obra de la fundación y en ayudarnos. Siempre venía con Marcos Peña y Ramiro Tagliaferro, y María Eugenia (Vidal) también. Ellos me ayudaron a mí a hacer las elecciones en el barrio y ahí los empezamos a conocer.

- A partir de ese momento, ¿comienza a participar en la actividad política?

- Bueno, en 2003 fueron las elecciones donde ganó (Aníbal) Ibarra, pero Mauricio siempre siguió viniendo, totalmente desinteresado, tomaba algo con Margarita y charlábamos. En el 2007, cuando él gana, yo empiezo a trabajar como asesor en la Legislatura porteña, en la Comisión de Vivienda, porque ya me interesaba seguir la carrera como legislador a largo plazo. Después, del 2011 al 2015, me propuse como abogado en Corporación Buenos Aires Sur y empecé a trabajar en la urbanización de las villas, porque me sentía más ligado a eso. Iba a ver a los vecinos de Los Piletones, que ya los conocía desde hacía diez años, para explicarles que la urbanización iba a pasar por la Corporación y que significaría que capaz los iban a relocalizar. La gente no quería entregar su vivienda, no se sentía segura de que fuera a ser cierto. Trabajamos así con Piletones, el barrio INTA, la villa 13. Yo había participado como candidato a diputado en la campaña de 2013, y también en la de 2015. Este año, con el cambio grande que había a nivel nacional, me dicen que hay posibilidades de entrar como legislador. Y el 18 de enero ingresé a la Legislatura en reemplazo de Héctor Huici.

- ¿Qué expectativas tiene para su mandato, que se extiende hasta 2017?

- Siempre seguí trabajando en el comedor de Los Piletones. Es un gran cambio para mí llegar a estar hoy en un despacho, donde tengo un grupo de asesores, teléfonos y puedo accionar y lograr resultados, me parece increíble. Siento que algunos prejuicios que tenía, como pensar que presentar proyectos iba a ser complicado, son nada que ver. Nuestro bloque escucha mucho, inmediatamente que se me ocurre algo ya estamos sentados charlándolo. Como legislador, salgo a recorrer lugares, la zona sur sobre todo que es lo que más me interesa que avance. Los diputados me ayudan, me asisten.

- El bloque oficialista está sumamente ligado a la agenda del Poder Ejecutivo, ¿cómo cree que pueden avanzar las iniciativas de un diputado del Pro?

- El Ejecutivo y el Legislativo tienen muy buenas ideas, pero creo que tenemos que ser lo suficientemente creativos y tener mejores ideas como para conseguir resultados. Cuando tenés un buen proyecto de ley, el Ejecutivo siempre te va a apoyar. Pasa que no hay que contrariar las políticas que tenga el gobierno y lo que ellos buscan es que todos estemos alineados. Lo que está faltando a veces son buenos proyectos o proyectos creativos. Soy de mirar mucho a los países que están mejor que nosotros y ver cómo ajustaron sus políticas a ciertas cosas, capaz nosotros nos volvemos locos pensando dónde ponemos una ciclovía; vamos a mirar a otro país súper desarrollado en el tema de ciclovías y nos damos cuenta qué nos conviene para aplicar la experiencia. Tiene que ver con abrir la mente, aceptar las ideas diferentes y ser creativos.

- Pese a que el Gobierno de la Ciudad impulsa su “crecimiento estratégico”, desde distintos sectores de la oposición y también la población, se cuestiona la postergación del sur de la Ciudad, ¿qué considera al respecto?

- La Ciudad de Buenos Aires mejoró muchísimo lo que es la integración del sur con el resto de la Ciudad. El sur estaba muy aislado. Me acuerdo de una discusión que tuve con Ibarra, cuando él era jefe de Gobierno, y me decía que Los Piletones era como un Estado aparte, porque tenía seguridad propia, educación propia, comedor y el Gobierno no entraba; en ese momento la policía no entraba a la villa, no se metía. Hoy está urbanizada, muchas cosas cambiaron. Creo que faltan muchas cosas para mejorar en la Ciudad, pero se avanzó bastante. Igualmente, se tiene que avanzar en las urbanizaciones de las villas, hay buenos proyectos de urbanización. Creo que la Villa 31 tiene que estar urbanizada pronto, también la Villa 20. Además, el proyecto de la Villa Olímpica, que ya está avanzado, es muy bueno para el sur. Va a generar muchísimas viviendas y muchísimo empleo.

La Ciudad está pasando por un cambio bastante fuerte. El traspaso que se hizo el año pasado de la Casa de Gobierno a Parque Patricios también fue muy importante. Puede ser que todas estas cosas no estén totalmente automatizadas, puede ser que haya gente que se quedó con la idea de la zona sur que vio hace quince años atrás, por eso yo a veces los llevo a conocer. La gente no se anima a conocer el sur. Creo que algo que le haría muy bien a los porteños es animarse a conocer, ir a recorrer la zona sur, concurrir a los recitales que se hacen en zona sur, eso va a ayudar a la integración. Desde el Gobierno hay muy buena política de integración de la Ciudad, pero a veces hay mucho prejuicio por parte de los ciudadanos.