Reabrió el tradicional Café Trianon, donde nació el sándwich de pavita

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Publicado: 11/12/2019
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Está en Boedo al 800, había cerrado en junio y, tras un cambio de dueño, fue reinaugurado hace una semana. En su carta volverá la especialidad que lo hizo famoso.
El miércoles pasado reabrió el Trianon, el café donde, cuenta la leyenda, se inventó el clásico sándwich de pavita en escabeche. Su nuevo dueño recuperó el bar, que había cerrado en junio, y puso la especialidad de la casa hasta en el logo, que ahora luce plumas de pavo real.
 
Trianon nació en 1940 en la esquina de Boedo y Pasaje San Ignacio, a media cuadra de donde está ahora. Fue allí donde Gabino Torres y su esposa María hicieron debutar al sándwich de pavita en una carta porteña. En ese cruce hoy está el café notable Margot, que también ofrece la especialidad y asegura que allí se creó. Esta es una verdad parcial porque, sí, el sándwich preferido de Perón se sirvió por primera vez en esa esquina, pero cuando la ocupaba el Trianon.
 
Con todo, aún falta para volver a probarlo: “Estará disponible recién la semana que viene, porque sus ingredientes requieren de un proceso de maceración que dura varios días”. Quien habla es Guillermo Álvarez, que compró el fondo de comercio a los administradores anteriores. Y a quien le llevó tiempo contactar a los descendientes de los primeros dueños para recuperar la receta original.
 
A tal punto es importante el sándwich de este café que hasta forma parte del diseño de la nueva versión del bar, que incorporó la palabra “Grand” a su nombre original, como se llama uno de los châteaux de Versalles. “Introdujimos una corona de plumas de pavo real en los nuevos logos como parte de la nueva identidad, para jugar un poco con el mito del lugar”, explica Esteban Ron, experto en branding.
 
Fue Ron quien tuvo a cargo el desafío de diseñar la marca actual, que lo llevó a indagar en la historia tanto de ese café como de su entorno. Fruto de esa búsqueda fue la elección de una tipografía de estilo art déco, que es “típica del barrio. Incluso el mismo Trianon la tenía en sus carteles”, cuenta. Así fue como surgió también la idea de incluir máquinas de escribir y libros en la decoración, “por la cercanía con la antigua editorial Claridad, que estaba a unos metros”. Roberto Arlt fue uno de los autores que escribió para esa editora.
 
El diseño del nuevo espacio es obra de los arquitectos Juan Bardi y Andrés Cabrera, de Box Arquitectura, que combinaron hierro, maderas y azulejos para mezclar lo clásico con lo actual. “Creamos una ambientación tradicional con un toque juvenil, con materiales modernos pero un uso antiguo. Es por eso que pusimos cerámicos de formato antiguo, de 10 por 10, pintados a mano; espejos que están envejecidos; maderas nuevas pero con un tratamiento para que luzcan rústicas y muestren el paso del tiempo”, explica Bardi.
 
Sentada a una de las mesas del renovado bar estuvo Alicia Rodríguez, secretaria de la Junta de Estudios Históricos de Boedo, que no quiso perderse la inauguración. “Me pareció fantástico, muy lindo y muy elegante. Teníamos idea de que había gente trabajando pero no sabíamos que volvían como Trianon, un nombre que está en el barrio desde hace casi 80 años”.
 
Durante la semana de estreno hubo shows de zancos y música en vivo por las tardes. Y, desde luego, los clientes esperan el regreso del tan mentado sándwich de pavita en escabeche, una propuesta que promete.
 
clarin.com