Según trascendió, la remoción habría sido uno de los pedidos del futuro mandatario para el día del acto de su asunción, este martes 10 de diciembre.
Operarios del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires removieron durante la madrugada de este lunes 9 de diciembre las rejas que custodiaban la Plaza de Mayo.
Las rejas en Plaza de Mayo fueron el centro de disputa durante los últimos años en la Ciudad. En 2018, el Gobierno porteño realizó una serie de remodelaciones en esa plaza. Entre ellas, reemplazaron el vallado que cubría la mitad de la plaza cercana a Casa Rosada desde 2002. En su lugar se emplazó una reja permanente de mejor calidad estructural y estética, con portones que permitieran o restringieran el ingreso para peatones o para vehículos que deban transitar por las calles Yrigoyen o Rivadavia.
En enero de 2019, la Justicia porteña falló contra la instalación, que estaba dentro del plan de obras de renovación del predio que duró seis meses. Tras la presentación de un amparo del Observatorio del Derecho a la Ciudad, el juez Osvaldo Otheguy declaró ilegal su colocación debido a que no respetaba un artículo del Código Urbanístico que rige sobre la disposición urbana en la Plaza.
En este marco, la mayoría oficialista en la Legislatura aprobó en junio de 2019 un proyecto del Ejecutivo para introducir en el Código los cambios que se requerían para considerar legal el enrejado. La norma fue sancionada con doble lectura tras una audiencia pública y sostenía que “se permite la instalación de un cerco de seguridad (reja) emplazado de modo transversal desde Av. Hipólito Yrigoyen hasta Av. Rivadavia, por detrás de la Pirámide de Mayo, a la altura del eje de las calles Defensa y Reconquista”.
En una entrevista para Página12, el presidente electo, Alberto Fernández, aseguró que “todo lo que me aleje de la gente me causa dolor, daño y enojo”.
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