La relación entre Horacio Rodríguez Larreta y el radicalismo entró, desde que el jefe de Gobierno porteño fue reelecto, en un sube y baja permanente, entre tensiones y gestos de unidad.
Los dos interlocutores privilegiados son el senador Martín Lousteau y el diputado nacional Emiliano Yacobitti, quienes también, a su vez, discuten los lugares de poder en la Ciudad con el vicejefe porteño, Diego Santilli. Esperen a marzo, les mandó a decir el jefe de Gobierno porteño a los más apurados por obtener lugares ante la presión.
Acaso por ello, e intentando balancear el poder, Larreta llevó como encargado del flamante Ministerio de Desarrollo Económico para su segunda gestión al radical PRO José Luis Giusti. En sus primeros años como jefe comunal ya había tenido al también radical Martín Ocampo en Seguridad. Giusti no llevó una gran estructura de radicales. Aunque uno de ellos es Daniel Nieto, quien será subsecretario de Inclusión. Se trata de un histórico de Franja Morada de la Facultad de Ciencias Económicas de la UBA, quien trabajó con Jorge Todesca en el Indec.
También sumó a Pablo Lera como viceministro de Desarrollo Económico, de buena sintonía con Lousteau, y quien viene de trabajar en Presidente Perón junto al referente local, Guido Giana. En la estructura porteña, Lousteau se llevó uno de los lugares más codiciados: la presidencia del Banco Ciudad, que quedó en manos de su primo, Guillermo Laje, de larga trayectoria en el área de finanzas, y logró mantener a Gastón "Yaya";Rossi como director.
Otro jugador clave de la UCR que desembarca en la Ciudad es Claudio Presman, ex titular del Inadi, como nuevo presidente del Consejo Económico y Social.
Jesús Rodríguez, por su lado, perdió a una funcionaria en la Corporación Sur, pero intenta recuperar otros lugares (ya tiene al legislador Guillermo Suárez).
El bloque UCR tiene nueve integrantes y allí, por caso, está Ocampo, quien no se sumó a la bancada del PRO, disgustado por no haber sido el elegido para presidir el cuerpo parlamentario. Ni siquiera jefe de bloque. Esa bancada suma los histeriqueos de Juan Nosiglia, uno de los hijos del Coti.
Por su lado, el radical Alejandro Gómez, ex ministro de Cultura bonaerense, podría desembarcar en el directorio del Teatro Colón.
Finalmente, la relación con Daniel Angelici se mantiene con bemoles. El ex presidente de Boca perdió, por primera vez en casi diez años, al subsecretario de Justicia, Hernán Najenson. Sin embargo, no tendrá problemas en sostener su esquema de poder: repuso un director del Instituto de la Vivienda (Gustavo Mola), busca meter un director en la obra social de municipales, mantiene un director en la Corporación Sur y busca un director en Ausa.
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